Yo en amores soy muy ligera, Amo a los hombres como si fueran Ropa interior de quita y pon. Ropa interior de quita y pon.
Primero amé a un joven activo Con mucha hombrera y mucha tierra, Tanto en La Habana como en Saigón. Tanto en La Habana como en Saigón.
Luego yo amé a un estudiante Que llegaría a ser cantante Y con la fama se le olvidó Que su primer amor fui yo.
Y es que en amores soy tan ligera, Amo a los hombres como si fueran Ropa interior de quita y pon. Ropa interior de quita y pon.
Más tarde amé a un genio del cine, Nadie como él para decirme: “Aunque a ti siempre te adoraré, Yo con mi novia me casaré”
Por fin amé a un gran campeón De waterpolo y natación, Pero muy pronto se terminó Pues vino un gánster y lo mató.
Y es que en amores soy tan ligera, Amo a los hombres como si fueran Ropa interior de quita y pon. Ropa interior de quita y pon.
Ahora me citan viejas calvicies Especialistas en sexy ficción, Y me proponen un tropezón. Y me proponen un tropezón.
Pero, aunque en amores sea tan ligera Que amo a los hombres como si fueran Ropa interior de quita y pon. Yo aún espero a un hombre entero, Guapo y feo, duro y tierno, Que se proponga mi redención.